Dice el tópico deportivo que “las estadísticas están para romperlas” y el Grupo Pinta – Torrebalonmano ha estado a punto de cumplir con esa máxima en su partido ante el F.C.Barcelona. Los torrelaveguense rozaron la victoria en el pabellón Joan Gamper. Solo el cansancio evitó que los cántabros fuesen el primer equipo capaz de vencer a los culés en la presente temporada.
El partido arrancó con un Grupo Pinta muy concentrado. Todos sabían que para pescar algún punto en una cancha tan complicada había que estar el máximo desde el primer minuto. Con una defensa intensísima y constantes salidas al contra ataque, el escenario soñado por los cántabros comenzaba a hacerse realidad. 1 a 4 en los primeros cinco minutos.
Los pupilos de Toni Gerona tardaron en comenzar a carburar pero cuando lo hicieron redujeron la diferencia inicial de los visitantes. Ambos equipos apostaron por un balonmano rápido, atrevido, con claro protagonismo para los ataques. Con el tanteador igualado, el choque se convirtió en un combate de boxeo entre dos púgiles convencidos de sus posibilidades de victoria. La diferencia clasificatoria entre ambos equipos no se plasmó en la cancha. A pesar de las bajas de Joaquín Marcos y Alberto Pérez, el equipo estuvo en partido en todo momento. Al descanso, empate a 19.
En el segundo acto, se mantuvo la misma tónica: igualdad total e intercambio de golpes. A cada gol del Barça, respondía el Grupo Pinta con la misma moneda. Los de Juan Escudero volvieron a hacer gala de su solidaridad dentro de la cancha. Ese juego colectivo, con Abel Lamadrid como estilete ofensivo y Jorge Pérez como bastión atrás, deparó una situación inimaginable en la previa del encuentro. El todopoderoso Barcelona, con varios jugadores de la primera plantilla en sus filas, estaba contra las cuerdas. Con cinco minutos por jugar, perdía por uno. Las alamas blaugranas sonaban con más fuerza que nunca un poco después. Quedaban 3 minutos y el Grupo Pinta ganaba por dos.
Cuando parecía que la sorpresa iba a consumarse, pasó lo inevitable. En un partido planteado como un correcalles, con acciones veloces y poco tiempo para coger aire, la profundidad de banquillo acaba siendo determinante. Los locales llegaron más frescos al tramo definitivo del choque. En esos momentos, emergió el extremo Aitor Ariño para enterrar la ilusión de los naranjas. El castigo físico y la entrega exhibida durante los 60 minutos de juego nublaron la clarividencia del Grupo Pinta justo cuando más falta hacía. Al final, 30 a 29 y regreso a casa de vacio para un equipo que mereció mucho más en la cancha del líder. Las victorias morales no añaden puntos a la clasificación pero pueden marcar el desarrollo de una temporada. El de hoy ha sido uno de esos partidos. Uno de esos en los que subes al autocar pensando que perder así es ganar.
FICHA DEL PARTIDO
F.C. Barcelona. Ignasi Admenlla, Rodrigo Corrales; Khaleb Centuuk (1), Joan Amigo, Adriá Figueras (7), Johnny Medina, Víctor Montaya, Aitor Ariño (4), David Balaguer (3), Marc García, Carlos Molina (4), Víctor Saez (5), Alberto Miralles (2), Marc García Diéguez (4)
Grupo Pinta – Torrebalonmano. Jorge Pérez, Adolfo Gómez; José Miguel González, Víctor Borragán, Abraham Fontaneda, Álvaro Polo (2), Eugenio González (3), Jon Alzaga (2), Javi Peña (2), Abel Lamadrid (7), Fernando González Gundín (3), José Antonio Calderón (6), Ángel Fernández (4).
PARCIALES
1 – 4, 6 – 5, 9 – 9, 13 – 13, 17 – 16, 19 – 19 descanso
20 – 21, 22 – 23, 25 – 25, 26 – 27, 27 – 28, 30 – 29 final
Árbitros: Gerardo Eloy Bohigas y Joaquim Castañer
Pabellón Joan Gamper. 150 espectadores
