El Bathco BM Torrelavega concluye la primera vuelta de la competición enfrentándose a uno de los rivales más peligrosos del grupo. Más allá de sus virtudes deportivas, que son muchísimas, el Balonmano Alcobendas es un conjunto muy parecido al cántabro. Nos visita el club en el que se crio Álex Mozas y eso siempre es un arma de doble filo.Sobre todo porque, a falta de un solo encuentro para concluir la primera vuelta de competición en la División de Honor Plata, la carta de presentación del Balonmano Alcobendas es la mejor del grupo B. Ocho partidos disputados para seis victorias, un empate y una derrota. El único borrón en el expediente que presentan los madrileños es la derrota ante Vestas BM Alarcos Ciudad Real en la séptima jornada.
En el resto de encuentros disputados a lo largo de la primera vuelta, los pupilos de Samuel Trives siempre han logrado sumar. De hecho, ayer volvieron a hacerlo en el aplazado que tenían frente al BM Zamora Rutas del Vino. Ese encuentro, correspondiente a la tercera fecha del campeonato, se saldó con victoria madrileña por cuatro, 24 – 28. Ese resultado les basta para sumar su punto número 13 de 16 posibles y llegar al Trueba como líderes en solitario de la categoría.
Fieles a una filosofía de juego que aplican desde la base hasta el primer equipo, la dinámica de juego del Balonmano Alcobendas es muy similar a la que propugna Álex Mozas: defender y correr. A la hora de guardar su portería, Trives alterna defensas abiertas y muy activas con la disposición 6:0. Esta circunstancia, aderezada por una intensidad superlativa y las actuaciones de Ramón Fuentes bajo palos, les convierte en un equipo muy difícil de batir. Una de las virtudes de este equipo es su capacidad para convertir cualquier pérdida de balón del contrario en un contragolpe. Las transiciones defensa – ataque a un ritmo no apto para cardiacos son marca de la casa.
El central Alfonso de la Rubia es la piedra angular de una plantilla repleta de jugadores muy peligrosos. Gonzalo Velasco, Manu Catalina y Alberto López Boyarizo, todos ellos con experiencia ASOBAL, conforman una cohorte pretoriana de plenas garantías. Una columna vertebral que, bien complementada por jugadores jóvenes y talentosos, tiene a su alcance casi cualquier alternativa ofensiva. Desde el lanzamiento exterior hasta la combinación con el pivote, pasando por la eficacia de los extremos y las situaciones de contragol. Hacen de todo y todo bien.
Al margen del amistoso correspondiente al Torneo Ciudad de Torrelavega de 2019 y de la eliminatoria de Copa disputada hace dos campañas, en la que los naranjas eliminaron a los madrileños después de una prórroga, la última visita liguera del Balonmano Alcobendas al Vicente Trueba data de la temporada 2017/2018. En aquel curso, con Mozas en el banquillo madrileño y Soto en el cántabro, los visitantes se impusieron por la mínima, 27 – 28, en el primer encuentro de la segunda vuelta. Tras la experiencia ASOBAL de nuestro próximo rival, la irrupción del coronavirus evitó que Mozas recibiese a su ex equipo en el Trueba.
