No es el primer día de cole pero casi. La segunda vuelta de la competición en la División de Honor Plata será como volver a empezar de cero. Siete semanas después, el Balonmano Torrelavega afronta un nuevo partido de liga. Y no es un encuentro cualquiera. Los cántabros se desplazan hasta Artaleku para intentar superar al Bidasoa y relegar a un rival directo en la lucha por el play off de ascenso.
Atrás quedó la racha espectacular de cuatro victorias con la que el equipo de Diego Soto cerró la primera manga. El recuerdo de grandes actuaciones no basta para ganar en esa cancha. Eso sí, ayuda y mucho. Porque el Balonmano Torrelavega es consciente de que si hace las cosas bien puede terminar con otra de sus leyendas negras.
Y es que ganar en Irún no es lo mismo que ganar en cualquier otro sitio. Los puntos valen igual pero el prestigio no. El Balonmano Torrelavega quiere entrar en el selecto club de los equipos capaces de triunfar en una de las catedrales del balonmano europeo. A lo largo de la historia del club naranja, nunca lo han conseguido.
Para encarar un partido que comienza a las 18:30 horas, Diego Soto no podrá contar con Javi Peña, aquejado de molestias en la espalda. El hueco del lateral lo ocupará o Carlos Pérez o Sergio Crespo. Además, Jadim Sour, última incorporación naranja, debutará en partido oficial con sus nuevos compañeros. El pivote está demostrando en cada sesión de trabajo que puede aportar muchas cosas al equipo torrelaveguense. Tampoco llega al 100% el Bidasoa de Fernando Bolea. Leo Renaud, uno de los jugadores franquicia del equipo, será duda hasta última hora.
Con el francés del Bidasoa sobre la pista o sin él, este Balonmano Torrelavega acostumbrado a pulverizar récords se ha propuesto regresar de Irún con los puntos en el autobús. Si pudieron con el gafe de los partidos a domicilio, si lograron encadenar cuatro victorias seguidas o si pudieron terminar el año en puestos de play off de ascenso, ¿por qué no van a ganar en Artaleku?
