El Balonmano Torrelavega afronta una de las salidas más complicadas de la temporada. Después de 10 horas de autocar, los de Diego Soto se enfrentarán al Puente Genil en un partido que puede devolverles a la zona alta de la clasificación.
El calendario no da un respiro y obliga a los nuestros a enfrentarse a otro rival complicado de manera consecutiva.
Después de caer con contundencia ante el Barca hace siete días, los torrelaveguenses esperan regresar con algo positivo de su visita a la cancha cordobesa. Una vez más, el primer enemigo será la carretera. Un desplazamiento larguísimo en autocar que comenzará esta misma tarde. Durante todo el trayecto hasta la ciudad andaluza, los jugadores cántabros tendrán tiempo más que de sobra para ir analizando el partido.
Hasta la fecha, el Balonmano Torrelavega destaca por anotar muchos goles pero también porque recibe demasiados. Los cántabros son los segundos máximos realizadores de la liga únicamente por detrás del filial blaugrana. Ángel Fernández, Calderón y Javi Peña figuran en los primeros puestos en la lista de artilleros de la categoría. Sin embargo, los torrelaveguenses reciben muchos goles. Tantos como 132 en cuatro encuentros. Mejorar ese balance será clave para que el equipo consiga puntuar en una cancha muy exigente.
A pesar de que los andaluces han comenzado un poco titubeantes el curso y que no podrán contar con Guille de la Sierra, puntuar en el pabellón Alcalde Miguel Salas no es una tarea sencilla. Por parte cántabra, la plantilla viaja al completo.
El partido comenzará a las 18:30 horas y lo dirigirán los colegiados Héctor Fraile y Vicente Peris, del colegio valenciano.